Los edificios destacados que reunían la Academia eran el Alcázar, Convento de Capuchinos, picadero, Hospital de Santiago, comedor y al norte la Casa de la Caridad (Gobierno Militar).
Convento de Capuchinos
Construido para residencia de una comunidad de sacerdotes capuchinos en el siglo XVII. Se cede al Colegio General Militar y se convierte en cuartel. Constaba de tres pisos y una comunicación con el Alcázar mediante un paso cubierto (paso curvo). A lo largo de los años, sus salas darían varios usos a la Academia como dormitorios, clases, gimnasio, enfermería, etc. Durante el asedio fue ocupado por las tropas sublevadas y fue punto defensivo de la parte sur del Alcázar. Completamente destruido en 1936.
Convento Capuchinos |
Paso Curvo |
Hospital de Santiago
Fundado en 1175, se destinó como residencia para convalecientes de caballeros en las guerras contra el islam y como centro para canjear tropas moras apresadas por otros presos cristianos.
Entregado al Colegio General Militar, poco a poco fue entrando en estado de abandono puesto que algunas partes del edificio estaban muy deterioradas. Dinamitado y reconstruido se estableció como cuartel, caballerizas, cocinas de tropa y dormitorios de alumnos. Completamente destruido en 1936.
Picadero
Construido en 1887 sobre parte del solar del Hospital de Santiago. Tenía 12 metros de altura, la parte superior cubierta, grandes ventanales y testeros abiertos. Utilizado como cementerio durante el asedio. Completamente destruido en 1936.
Hospital de Santiago y Picadero en la parte este del Alcázar. |
Casa de la Caridad (Gobierno Militar)
Creada en 1775 para albergar a los viajeros que se trasladaban de Madrid a Andalucía. En 1846 es controlado por el Colegio General Militar lo habilitó para clases, enfermería, oficinas y una cuadra. Cuando se estableció la Academia de Infantería fue destinado como Gobierno Militar con biblioteca, oficinas y viviendas para altos cargos militares. Durante el asedio fue parcialmente destruido. Reconstruido después de 1936.
Antiguo Gobierno Militar |
Durante el asedio
La distribución de fuerzas para la defensa de la ciudad ante la llegada de la columna Riquelme se efectuó en las primeras horas del 21 de julio de 1936. La columna de Madrid alcanzó el cementerio, desviándose un grupo hacia la Fábrica de Armas y otro en dirección hacia la ciudad, tomando contacto con las fuerzas que ocupaban y defendían el Hospital de Tavera. Mientras se combatía en Tavera, se trasladaron las municiones de la fábrica a la vieja fortaleza. Al día siguiente se ordena la retirada de los puestos ocupados en la ciudad y del Hospital de Tavera por ser imposible aguantar con la defensa de este edificio. Comienza así el asedio del Alcázar y sus edificios adyacentes.
Los civiles refugiados así como los rehenes fueron distribuidos por los sótanos del edificio para su protección contra bombardeos y el fuego de artillería. Se distribuyeron armas y municiones entre los defensores, con el consejo casi como una ''orden'' de ahorrar munición. Se trazó la defensa en torno a los edificios del exterior del Alcázar, manteniendo una primera línea en todos, distribuyendo las guarniciones. Con las primeras descargas de artillería y los ataques aéreos se vieron afectados el comedor y las cocinas, así como el Picadero que se incendió por completo el día 1 de agosto. Las primeras bajas enterradas en el Picadero fueron del día 24 de julio, con el paso de las semanas en este lugar se albergaría un auténtico cementerio improvisado.
Mapa de la defensa del Alcázar. |
´´En ocasiones posteriores Moscardó y otros jefes presentes en la defensa, explicaron cómo la
idea básica de toda resistencia estaba apoyada en la invulnerabilidad de tres líneas fijadas sobre
el trazado defensivo. La A, la B y la C. Esta última comprendía el cuerpo central del edificio.
Intermedia estaba la B, en cuya zona se incluían las dependencias batidas ampliamente por la
artillería, y el Picadero incendiado.``
José Mª Barranco Gil - La defensa del Alcázar de Toledo
Al norte se encontraba el paso en zig zag y el Gobierno Militar, ocupado por miembros de la Guardia Civil, el edificio comunicaba con el Alcázar mediante un túnel subterráneo que permitía el movimiento de tropas a cubierto de la artillería. Justo enfrente estaba el Hospital de Santa Cruz, ocupado por tropas republicanas, desde donde se controlaba toda la fachada norte y desde donde había mayor intensidad de fuego contra el Alcázar. Algunas salidas de los defensores para establecer el fluido eléctrico para las radios se llevó a cabo sin éxito a través de la cuadra y el Gobierno Militar. En el mes de agosto la artillería ya había causado graves daños en la cuadra y pabellones situados en la zona del Paseo del Carmen. Para evitar las salidas se colocaron reflectores que iluminaban el Arco de la Sangre y la Cuesta del Carmen (actual calle Miguel de Cervantes). En septiembre se colocó la pieza de 7,5 justo delante del Gobierno Militar que terminó de destrozar el edificio después de haber intentado quemar las estancias desde las ventanas mediante mangueras que expulsaban gasolina.
Gobierno Militar |
Por el sur, las viviendas cercanas a la plaza de los Capuchinos fueron desalojadas por sus propietarios cuando el asedio se consolidó y el peligro era cada vez mayor. En estas casas se requisaron algunos alimentos por parte de los defensores en las numerosas salidas nocturnas que se producían.
''Diario de operaciones - 6 agosto 1936''
´´Se efectuaron requisas y reconocimientos en las casas de los alrededores de Capuchinos,
con resultados satisfactorios, aunque no en gran cantidad, pero que producen gran contento en
la guarnición.``
´´En ese día a que hacemos referencia, un suboficial de la academia propuso:
-Yo creo que si hiciéramos una salida por los alrededores,
de Capuchinos, conseguiríamos traernos «algo».
de Capuchinos, conseguiríamos traernos «algo».
Ese «algo» era comida, cualquier clase de alimento aprovechable, que hubiera podido
quedar en aquellas casas, desalojadas en su totalidad, puesto que estaban en
línea de fuego de baterías enemigas.``
línea de fuego de baterías enemigas.``
José Mª Barranco Gil - La defensa del Alcázar de Toledo
El edificio de Capuchinos, el comedor y las cocinas fueron poco a poco convirtiéndose en un montón de escombros, sobretodo cuando la aviación leal hacia acto de presencia bombardeando la zona, la artillería de San Servando y Alijares batía por completo la zona sureste y la puerta de la piscina por donde se abastecía y se revelaba a las fuerzas de los edificios exteriores. El mortero de 50 mm. que los defensores tenían en su poder se emplazaba de un lado a otro de la zona este, allí donde fuera necesario durante los sucesivos ataques de los milicianos. Los caballos y mulos son trasladados de una zona a otra para estar protegidos de los ataques y la artillería, de una de las cuadras pasaron a los lavaderos y los sótanos de la piscina.
Picadero |
Debido a los desperfectos en los edificios, se trasladaban las estancias como la enfermería y la cocina a posiciones mas resguardadas de la artillería como por ejemplo al Paso Curvo, los rellanos de la escalera principal y mas tarde a los sótanos. El día 3 de agosto tras la información recibida por uno de los civiles refugiados en los sótanos se dio a conocer la existencia de grandes cantidades de trigo almacenado en un sótano de las casas cercanas a la explanada este y la cuarta cuadra, fuera de los límites de la defensa. Al anochecer y mientras las baterías de Pinedo actuaban sobre Capuchinos, un grupo de defensores salió del Alcázar en busca del preciado trigo.
*Modelo 3D y renderizados Rafael Ortega |
´´Al anochecer, y por el comandante Araujo se requisan cuarenta y tres sacos de trigo más.
El resto de la noche transcurre sin novedad.``
Diario de operaciones del Alcázar de Toledo, 4 agosto de 1936
La zona oeste era la menos castigada por la artillería, todas las calles que daban a la cuesta del Alcázar estaban completamente controladas mediante barricadas y alambradas. Los milicianos controlaban y hostigaban la fachada oeste minando la moral de los defensores. Algunas salidas para requisar alimentos en las casas cercanas se efectuaban cruzando la calle en mitad de la noche aprovechando la oscuridad, dificultándose estas salidas en el futuro dado que también se colocaron reflectores que iluminaban la cuesta.
Calles cortadas mediante alambradas muy cerca del Alcázar |
Los túneles para las minas se comenzaron a excavar en agosto, reforzándose la vigilancia en las calles y casas de la zona oeste. Los defensores alertados por los ruidos subterráneos que emitían las perforadoras y las detonaciones, se disponen a localizar a la casa donde se efectúan las obras y poder impedir la progresión de los trabajos. Cayetano Caridad, un cabo de la Guardia Civil que había trabajado en su juventud en las minas de Río Tinto (Huelva), era el encargado de la observación y escucha de los trabajos subterráneos, falleciendo en su puesto el día de la explosión el 18 de septiembre.
Un grupo salió en busca de la casa en la calle Juan Labrador, portando botellas con gasolina y algunas granadas incendiarias. Rápidamente entre los escombros y las sombras se movieron hasta llegar lo mas cerca posible lanzando las granadas y botellas para incendiar la casa, rápidamente se abrió fuego de ametralladora y fusil desde las ventanas de la fachada oeste para proteger la vuelta del grupo y distraer la atención de los milicianos.
´´Ante tal peligro, ellos hacen salidas a las casas de la misma manzana.
Esta noche ha sido una de ellas. Sus intenciones serán el prender fuego a esta manzana de casas y cortar así los trabajos delas minas.
Los sitios donde se encuentran los compresores han sido
castigados con bombas de mortero sin causar daño.``
Diario del Guardia de Asalto Fernández Granados, 10 de septiembre de 1936
Días antes de la explosión de la mina se evacuó a las mujeres, niños y heridos fuera del alcance que suponían podía tener la explosión, sobretodo a los sótanos y estancias de la fachada este. La mina explotó y los mandos republicanos ordenaron los ataques por el norte y el sur, los escombros acumulados anteriormente mas los que generó la mina ayudaron a entorpecer el ataque republicano siendo también un elemento defensivo para los cadetes y guardias civiles del Alcázar.
Callejón del Lucio |
Los días 21-22 de septiembre se da orden de retirarse de la mayoría de edificios exteriores por no poder aguantar durante mucho mas tiempo su defensa por la fuerte acción artillera y los continuos ataques de las fuerzas leales. Las guarniciones externas pasan a la defensa del edificio principal distribuyéndose y reforzando los diferentes frentes. Conociendo la cercana situación de las tropas del Ejercito de África, se intenta resistir el máximo tiempo posible ante el empeño, casi obsesivo, de tomar el Alcázar antes de la lucha por la ciudad.
´´Se han dedicado a tapar las puertas que dan a la explanada para cortar la comunicación
con las fuerzas que había en pabellones y edificios exteriores a la Academia, y además bombardearon éstos, por lo que anoche tuvimos que evacuarlos y reunir toda la gente en lo que queda del Alcázar,
se quemaron todos los edificios evacuados (los que no lo estaban aún)
y se subió todo el armamento, etc.``
Diario del General Moscardó, 21 de septiembre de 1936
Vista de los edificios destruidos en la zona sur y este. |
Situación de los edificios exteriores. |
La caída de la fachada norte y sus torreones, facilitaron la entrada de proyectiles de artillería en el patio interior y sus galerías, las ventanas estaban cegadas para evitar el fuego de fusilería y muchas galerías subterráneas y salas estaban completamente bloqueadas para dificultar la entrada de los atacantes.
Escalera principal. |
Galerías subterráneas cegadas. |
Estancia en el interior del Alcázar y horno. |
Despacho del General Moscardó. *Retratos del General y su hijo Luis Moscardó. |
De los edificios exteriores actualmente no queda prácticamente nada, fueron destruidos casi en su totalidad y después de la guerra los restos fueron completamente derribados y desaparecieron, la Academia de Infantería se trasladó al otro lado del río justo en frente de la fachada este.
Restos del Hospital de Santiago en la actualidad. |
Fachada este y edificios. A la izquierda vemos la explanada del Corralillo de San Miguel. |
Destrucción en la fachada este. |
Fachada este. Puerta de la Piscina. |
Rampa este y puerta de los comedores. |
Restos del Hospital de Santiago y el Picadero. |
Vista aérea Alcázar de Toledo y alrededores en la actualidad. |
*Modelos 3D y renderizados de Rafael Ortega.