Calle de Santa Fe

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Batida por la fusilería de los defensores, esta calle era el paso de milicianos hacia la calle Miguel de Cervantes (antes Cuesta del Carmen) donde se encontraba el Gobierno Militar y el Museo de Santa Cruz. Tiene entrada al Convento de Santa Fe donde las fuerzas republicanas concentraban las tropas y tenian libre movimiento hacia el Paseo del Miradero y el antiguo hospital de Santa Cruz.

Milicianos y camilleros en la Calle Santa Fe. 

Los carros de asalto Schneider CA-1 Modelo 1916 (España disponía de cuatro carros de este tipo en 1936) que vinieron con las tropas de Riquelme en los primeros días del asedio fueron utilizados contra el Hospital de Tavera a las afueras para después subir a Zocodover y lanzarse contra el edificio de Gorbierno Militar en la actual calle Miguel de Cervantes. (No está confirmado pero seguramente con la columna Riquelme llegaran solo varias autoametralladoras Bilbao y no carros Schneider). 

Modelo utilizado en el asedio con las pintadas de JSU en uno de sus laterales.

´´…había una especie de monstruo arqueológico del armamento militar que mas tarde todos contemplamos, un primitivo tanque de 1919, gruesamente blindado, con cadenas protectoras de las ruedas y un fuerte espolón de proa, provisto de un cañón.``  
Luis Quintanilla en ´´ Los rehenes del Alcázar de Toledo``.


Carro Schneider en la Calle Santa Fe. 

´´El monstruo metálico continuó la persecución por la estrecha calleja que aboca a una de las puertas del Gobierno Militar, y al embestir hacia ella se desvencijo su vieja maquinaria, quedando allí inutilizado hasta el final del asedio….`` 
Luis Quintanilla en ´´Los rehenes del Alcázar de Toledo``


Vista de la misma calle desde el otro lado.
Carro Schneider atascado entre los escombros. 


** Seguramente el carro Schneider que quedó atascado en la calle Santa Fé / Cuesta del Carmen fue durante el asalto del día 18 de septiembre después de la explosión de las minas y no en los primeros días del asedio.

Museo de Santa Cruz

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Los primeros días de la sublevación militar, el Museo de Santa Cruz fue ocupado por los hombres sublevados de Moscardó. Tras los combates en el Hospital de Tavera, las tropas se retiraron hacia la ciudad, el Alcázar y sus edificios colindantes. Los rebeldes abandonaron voluntariamente el Hospital de Santa Cruz pasando al otro lado de la calle para defenderse desde el edificio del Gobierno Militar  que comunicaba con el Alcázar por un pasadizo subterráneo (según algunas fuentes). La Puerta de Hierro, que daba acceso al paso en zigzag de la fachada norte, se bloqueó para evitar el paso de fuerzas republicanas. El Gobierno Militar sería el primer obstáculo a batir por parte de los milicianos para intentar llegar hasta el Alcázar por el norte. El Museo de Santa Cruz comunica con el Convento de Santa Fé y este con el Paseo del Miradero donde se estableció un puesto de mando, ambulancias y punto de organización republicano. 


´´Fuimos después al Hospital de Santa Cruz, donde teníamos el altavoz que nos servía de comunicación con el Alcázar.``
Luis Quintanilla - *Los rehenes del Alcázar de Toledo.*


 ´´...en cuyo centro estaba emplazado el Gobierno Militar, era un lugar
batido por la fusilería que desde Santa Cruz nos hostigaba con mucha frecuencia.``

José María Barranco Gil - *La defensa del Alcázar de Toledo.* 

Tropas gubernamentales frente al edificio del Gobierno Militar desde el Museo Santa Cruz.


Cañón de 75mm republicano disparando contra el Gobierno Militar el 20 de septiembre de 1936.


Republicanos frente al Gobierno Militar y la Puerta de Hierro que daba acceso por la parte norte del Alcázar.


En la actualidad, podemos ver todavía las huellas de los combates en la fachada del Museo de Santa Cruz, en sus ventanas y en su parte derecha, el hueco por la falta de un sillar de piedra desde donde los republicanos intentaron propulsar, mediante mangueras, gasolina para incendiar el Gobierno Militar. 

Impactos de bala en la fachada.
Vista de la del Museo Santa Cruz.
En su esquina derecha se aprecia el hueco del sillar que falta.



Robert Capa que pasó dos veces por Toledo durante la contienda, tomó estas fotografías en el Museo de Santa Cruz el día 18 de septiembre durante el asalto después del estallido de las minas.







Milicianos en el balcón de Santa Cruz donde Robert Capa tomó igualmente fotografías. 

En el interior del edificio, las obras de arte y las principales salas de exposición sufrieron los percances de la guerra y el daño causado por el paso de los milicianos perdiéndose muchas de estas importantes piezas. 




En el documental Ispanija rodado en España por Roman Karmen y Boris Makaseyev y dirigida por Esfir Shub, hay escenas grabadas en Toledo durante los días del asedio. En él aparecen milicianos en la plaza de Zocodover, la barricada de la Calle Armas y el transporte de heridos así como los patios y galerías de Santa Cruz.


Roman Karmen y Mijaíl Koltsov en las cercanías del Alcázar y del Museo de Santa Cruz.



Aquí tenéis la parte del documental Ispanija donde aparece Toledo durante el asedio.




Alrededores del Alcázar

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Poco a poco los alrededores del Alcázar fueron cercándose. Para ello fue elemental el uso de barricadas y alambradas y así, evitar las posibles salidas de los defensores por las calles de San Miguel, San Justo, la plaza del Seco por el sur y la plaza de la Magdalena por el oeste. Por el norte se encontraba la plaza de Zocodover, ya ocupado por los milicianos y las tropas de Riquelme y al este la barrancada que daba al rio Tajo que cerraba el recinto. A pesar de estas posiciones que más que defensivas eran de contención, los defensores del Alcázar realizaban continuos movimientos y salidas nocturnas con la intención de buscar víveres o cualquier otra cosa que pudieran necesitar o sirviera para aguantar con vida un día más en el interior del recinto. Dentro de las instalaciones de la antigua Academia también fue común el uso de barricadas o parapetos realizados con muebles, escombros, etc. para evitar la entrada de los milicianos asaltantes en las semanas siguientes. 


Mapa del perímetro defensivo del Alcázar y el cerco republicano alrededor. 
L. Quintanilla - Los Rehenes del Alcázar de Toledo


´´Por informes de observadores se sabe que algunas de las calles que rodean el Alcázar por el sur y oeste tienen alambradas y barricadas; esto, unido a los reflectores de Zocodover y la plaza de la Magdalena, muestra que el enemigo tiene el temor de que podamos efectuar alguna salida.`` 
  José Mª Barranco Gil - La defensa del Alcázar




Plaza del Seco.
Al fondo se puede ver el callejón de la Soledad que comunicaba justo con los muros del Alcázar.
Se aprecia alambrada para cortar la calle. 


Vecinos y guardias de asalto en la Cuesta de San Justo.
La proximidad del Alcázar y los combates mantuvo en alerta a todo el vecindario. 

Plaza de la Magdalena.
En el centro y unido a la Iglesia se encontraba un edificio que a día de hoy
ha desaparecido por la destrucción durante el asedio. 

Destrucción en la Plaza de la Magdalena con el Casino al fondo. 


Jóvenes jugando y posando para el fotógrafo en la Plaza de la Magdalena. 


Barricada y milicianos en el Callejón del Lucio junto al Casino. 


Bajada Corral de Don Diego.
Se observa otra barricada al finalizar la Plaza de la Magdalena. 




La Plaza de Zocodover durante el asedio

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Debido a la cercanía de la plaza con el Alcázar, Zocodover fue testigo directo de los hechos ocurridos en el verano de 1936. Barricadas de colchones primero, sacos terreros después y los propios adoquines de piedra, se colocaron en los puntos estratégicos. Esto facilitaba el cerco, un control al perímetro defensivo de las fuerzas sublevadas y una visión privilegiada de la fortaleza sin correr "peligro" para los milicianos. 

Aquí van algunas composiciones con fotos actuales de aquellos días.



´´Oí unos disparos y fui a la plaza de Zocodover, aquello era la diversión de los sitiados y los sitiadores. Los primeros sacaban desde una ventana un espejo de lavabo sujeto a un palo, los milicianos tiraban al espejo, pero al ver los sitiados apuntar los fusiles por el espejo, rápidamente retiraban este.``
*Los rehenes del Alcázar de Toledo* de Luis Quintanilla



Guardia de Asalto y un paisano armado en la Plaza de Zocodover.
Son los primeros momentos de la sublevación en el interior de la ciudad.


Milicianos disparan desde la esquina de Zocodover - Cuesta de Carlos V.
Actualmente en esta esquina se encuentra el Café Bar El Foro y Mcdonald´s.

Miliciano disparando contra las ventanas altas del Alcázar desde la esquina de Zocodover.


Aquí se pueden apreciar los daños en el edificio donde actualmente se encuentra El Foro y Mcdonald´s.

Vehículo blindado Modelo Bilbao en la Plaza de Zocodover.
Actualmente en la parada del trenecito turístico de Toledo. 


Plaza de Zocodover y cuesta del Carlos V. 



*actualizada en junio 2016.

Declaración del Estado de Guerra en Toledo

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El 21 de Julio tras leerse en la Plaza de Zocodover la declaración del "Estado de Guerra", Moscardó distribuyó fuerzas sublevadas por la ciudad ocupando puntos estratégicos y de máxima importancia como: Hospital de Tavera, Fábrica de Armas, Bancos, Ayuntamiento, Correos y Teléfonos, Matadero, Cuartel de Asalto en la plaza de Padilla, Prisión Provincial así como las puertas de la muralla y puentes sobre el río Tajo. Tras los combates en el Hospital de Tavera durante todo el día 22 de julio contra la Columna Riquelme llegada desde Madrid para sofocar la rebelión y el traslado de  las municiones de la Fábrica de Armas hasta el propio Alcázar, se da la orden de retirada al interior de la ciudad y edificios pertenecientes a la Academia. A partir de aquí comienza un asedio que iba a durar hasta el día 27-28 de Septiembre con la entrada en la ciudad de las tropas del general Varela y la liberación de los sitiados. Echemos una mirada al pasado 80* años después de estos hechos con composiciones fotográficas, testimonios, vestigios y recuerdos del pasado. 






´´…parte de la plaza (Zocodover) y tres calles que abocaban a ella estaban amparadas con colchones, sacos terreros, puertas y lo que a la imaginación de un soldado le inspira la confianza de su defensa.`` 
 Luis Quintanilla en su libro *Los Rehenes del Alcázar de Toledo.*

Calle Armas

Actualmente la Estereria y la Fonda son la tienda Artesanía Alhambra y el Hotel Domus.


Barricada de colchones en los primeros días del asedio justo entre Zocodover y la Calle Armas.


La calle Armas durante los primeros días de la guerra.
Barricadas improvisadas con colchones y mucho calor.


Los locales cercanos a Zocodover son perfectos par atrincherarse y hacer posados para los fotógrafos. 


Paso a paso hasta llegar a Zocodover. Avance de posiciones mediante barricadas improvisadas.
El nº 15 de la Calle Armas, el Bar Toledo.


Paseo del Miradero (Colección Doherty). 


(actualizado junio de 2016)